¿Es imposible actualizar el data center?, ¿más aire soluciona sus problemas?, ¿es necesaria una estructura compleja para la administración TI?, ¿lo que funciona se deja quieto? Cuatro creencias sobre las que todo tomador de decisión de tecnología debería reflexionar.
Los data centers son en la actualidad una herramienta fundamental para las compañías, sin importar el sector al que pertenezcan. Muestra de ello es que ha habido un crecimiento a dos dígitos en varios de ellos: 18,8% en el sector Médico; 11,4% en Energía y Provisión, y en Servicios Generales la variación ha sido de 10,4%, de acuerdo con información de UPSISTEMAS, empresa líder en integración de infraestructura tecnológica.
Sin embargo, directivos y líderes de las organizaciones tienen con frecuencia creencias erróneas en torno a estas instalaciones, esenciales para el funcionamiento de muchas organizaciones. Al respecto, UPSISTEMAS, con apoyo de su aliado Eaton, presenta cuatro mitos importantes y frecuentes relacionados con los data centers.
Mito #1: El data center original no tiene capacidad de expansión o actualización
Antes de juzgar que un data center carece de la capacidad de expansión o actualización, se deben hacer algunas preguntas: ¿qué tan viejos son mis sistemas eléctricos y mecánicos/aire y cuánto me están costando?, ¿cuánta energía consumen actualmente?, ¿con los equipos actuales puedo soportar el crecimiento TI en los próximos 5 a 10 años?
Tenga en cuenta que los equipos antiguos se enfrentan al reto de obsolescencia en componentes, sin total garantía de disponibilidad de repuestos. Las UPS tienen una vida útil estimada de 10 años, al igual que el aire acondicionado. Por su parte, los Static Transfer Switch pueden funcionar bien entre 12 y 15 años, y los interruptores de potencia alrededor de 15 años.
Lo importante es que hoy en día los fabricantes ofrecen productos con mayores eficiencias y sostenibilidad. Actualmente más de 50% de los planes son diseñados para ser más sostenibles y normalmente pensados para operaciones de largo plazo.
Mito #2: Más aire no resuelve los problemas
De acuerdo con estudios de la compañía, una solución correcta puede reducir los gastos de enfriamiento en 30%. La tendencia clave está en identificar las densidades energéticas, pues si es mayor deberá tener más equipamiento de IT por metro cuadrado.
Un aspecto decisivo está en la factibilidad del sitio utilizado para el data center. El consejo de UPSISTEMAS es incrementar el número de chiller´s operando en modo free-cooling, lo que requiere más trabajo en la etapa de diseño para separar y dirigir apropiadamente el flujo de aire, algo que no tiene que manejar a profundidad el director de operaciones, pero que requiere de una asesoría de primera categoría.
Una de las actualizaciones recomendadas está en la contención por rack -o pasillo (frío o caliente)-, pues de esta manera se incrementa la eficiencia total del data center, en mayores temperaturas de entrada y en ahorro energético.
Mito #3: Necesita un experto y una gran infraestructura en su Data Center para su TI
En realidad, hoy en día las soluciones de monitoreo están recopilando datos más detallados por cada dispositivo, automatizando procesos, mitigando riesgos y generando ahorros, sin necesidad de acudir a una gran infraestructura y a técnicos muy especializados.
Es claro que los ingenieros deben tener una visión holística, más completa para optimizar la fiabilidad, la seguridad, la eficiencia eléctrica, mecánica y TI.
Mito #4: Si funciona, no lo toque
No es cierto. Hay que actualizar y validar los documentos de operación del data center, así como el mantenimiento de los equipos, bien sean UPS, aires acondicionados o sistemas auxiliares. No olvide:
- Planos y manuales de operación
- Actualizar cambios de su sistema
- Revisar que las identificaciones de sus equipos estén completas
- Revisar la coherencia entre los sistemas documentados y marquillados.
Con estas recomendaciones podrá tener una operación más limpia, eficiente y libre de riesgos por suponer o tomar decisiones basadas en conceptos revaluados o simplemente erróneos.