Ya han pasado cerca de 18 meses en los que se han experimentado un sinnúmero de cambios que han transformado la vida de las personas, especialmente, la manera en que trabajan. La coyuntura ha dado paso a la masificación de modelos y tendencias, muchos de ellos, inéditos. La movilidad y la flexibilidad son atributos que les permitieron a las áreas de Recursos Humanos de las organizaciones establecer estrategias en las que el teletrabajo, el trabajo flexible o la oficina híbrida han ido cobrando mayor protagonismo.
De acuerdo con el “Cuarto estudio de penetración del teletrabajo en empresas colombianas’, del MinTIC, en 2018 había cerca de 122.000 teletrabajadores en Colombia. En febrero de 2021, la cifra tuvo un incremento de cerca del 400 por ciento.
“Colaboradores de organizaciones de diferentes sectores manifiestan sentirse más productivos, aprovechando los tiempos de desplazamientos para otras actividades. Igualmente, afirman poder contar con tiempos para compartir en familia y alcanzar el tan anhelado equilibrio entre la vida personal y profesional, así como colaborar con el medio ambiente al contaminar menos”, afirma Hardwek Casallas, asesor de la iniciativa teletrabajo del MinTIC
En una realidad laboral en constante transformación, es necesario que las organizaciones tengan la capacidad de adaptarse a este entorno y a las diferentes tendencias que se imponen.
El estudio “Tendencias globales de talento 2021”, desarrollado recientemente por la consultora Mercer, el 69 por ciento de los líderes empresariales de Colombia confirmó haber desarrollado políticas y prácticas de trabajo flexible.
“La implementación de esos esquemas les ofrece un sinnúmero de ventajas a las organizaciones. El modelo brinda herramientas para optimizar la infraestructura de la organización, garantiza una mayor productividad, fomenta la cooperación y una mayor satisfacción del colaborador que redunda en el compromiso”, dice Luis Fernando Londoño, consultor senior de career para Mercer Latinoamérica.
¿Cómo adoptar adecuadamente dicho modelo flexible?
En primer lugar, es necesario tener claro que esta es una modalidad que va más allá del trabajo remoto, ya que garantiza que se evalúe si todas las posiciones pueden ser flexibles cuando sea necesario.
Una vez hecho esto, es importante establecer una cultura de confianza y responsabilidad como elementos clave para el liderazgo y la colaboración. Además, se requiere de del desarrollo de una infraestructura que les permita a los colaboradores adelantar sus labores sin contratiempos.
“Son muchas las empresas que todavía ignoran cuáles son las herramientas que más se ajustan a las necesidades y tareas diarias de su negocio. Otras por ejemplo, han evaluado e implementado ciertas alternativas, aumentando así la complejidad de sus procesos y la desconexión con sus colaboradores, con reducciones en los índices de productividad”, manifiesta Sugueit Tautiva, presales manager en Axity Colombia.
Considerando esa realidad, es claro que es fundamental integrar las mejores soluciones que fomenten una dinámica de trabajo colaborativa y en las que los colaboradores puedan aportar ideas y generar soluciones a requerimientos puntuales.
En ese sentido, las herramientas de teleconferencia son importantes.
Por otra parte, las herramientas de gestión se convierten en aliados que ayudan a los colaboradores a optimizar sus tiempos y priorizar tareas.
Existen soluciones como el administrador de TI, que permite ver y gestionar, de manera centralizada, llamadas, mensajes, reuniones, centros de contacto, servicios y dispositivos de colaboración en equipo.
Finalmente, y ante el aumento de conexiones, es necesario integrar soluciones de ciberseguridad cada vez más efectivas, que permitan anticipar cualquier situación que ponga en peligro la operación de la organización.
