La discalculia es la gran desconocida de las denominadas Dificultades Específicas del Aprendizaje (DEA), pero es más común de lo esperado. De hecho, se calcula que, en Colombia, en un salón de clases de 25 niños, al menos uno sufre de discalculia.
Teniendo en cuenta que recientemente se conmemoró el “Día Internacional de las matemáticas”, una fecha que año a año toma más relevancia y que invita a generar una mayor concientización frente al estudio y desarrollo de habilidades de esta ciencia. Más aún, cuando las personas en sus rutinas diarias tienen una gran interacción con los números, y porque estas también tienen un amplio protagonismo en el proceso de formación de las carreras del futuro, se pretende dar a conocer qué tan en riesgo están los niños a padecer de esta condición.
Por tanto, sensibilizar sobre este trastorno del desarrollo del aprendizaje que dificulta el entendimiento de las matemáticas, Smartick, el método de aprendizaje online de matemáticas y comprensión lectora líder a nivel mundial para niños y niñas de 4 a 14 años, quiere invitar a realizar un test para detectar si los niños del país están en riesgo de sufrir discalculia y de esta manera tomar medidas correctivas a tiempo.
La llamada ‘dislexia de los números’ conlleva consecuencias a nivel académico y psicológico en los niños, pero el problema se extiende también a las acciones del día a día, como leer un reloj de agujas, memorizar teléfonos, controlar las dosis de las medicinas o calcular el cambio en una compra, por ejemplo.
Con el objetivo de dar visibilidad a este trastorno y ayudar a su detección temprana, Smartick, en colaboración con expertos de las universidades de Málaga y Valladolid, ha diseñado este test estandarizado online gratuito que permite identificar en tan solo quince minutos a aquellos niños en riesgo de tener discalculia.
Esta prueba, que aboga por la inclusividad de las personas con dificultades de aprendizaje, está disponible en español, inglés y portugués.
El test está dirigido a niños de entre 6 y 10 años, ya que, según los expertos, estas son las edades idóneas para identificar el problema y empezar a ofrecerles los recursos necesarios que les ayuden a adaptarse al proceso de aprendizaje sin llegar a frustrarse.
Para determinar el riesgo de los menores a tener la llamada dislexia de los números, el test de Smartick propone distintas actividades divididas en tres áreas a analizar:
- Comparación y reconocimiento de cantidad: tareas diseñadas para examinar la habilidad de reconocer y manipular cantidades numéricas sin contar. En específico, se evalúa el reconocimiento automático de pequeños conjuntos (subitización) y la capacidad de percibir grandes numerosidades (sistema numérico aproximado).
- Números arábigos y numeración: ejercicios de reconocimiento numérico y comparación de números para evaluar el procesamiento del código simbólico verbal.
- Aritmética: ejercicios de operaciones simples de suma, resta y multiplicación.
La identificación temprana de la discalculia es crucial, pues permite poner en marcha programas de intervención que resultan efectivos para minimizar las consecuencias del problema. Se recomienda una enseñanza de las matemáticas muy pautada, con secuencias de aprendizaje bien estructuradas y con uso de objetos tangibles, que favorezcan la comprensión profunda de los conceptos matemáticos. Esto es esencial antes de progresar hacia conceptos más abstractos.
En este sentido, Smartick, el método de aprendizaje online de matemáticas y comprensión lectora es de gran ayuda en el refuerzo de los niños con discalculia, ya que su inteligencia artificial permite conocer el perfil y velocidad de aprendizaje de cada niño. De esta forma, se adapta el contenido en tiempo real a su comportamiento para que pueda desarrollar confianza en sí mismo y una actitud positiva hacia las matemáticas, libre de frustraciones.
“Hemos querido aportar a la comunidad educativa y a los padres un instrumento con el que poder detectar de forma temprana este trastorno de aprendizaje matemático poco conocido. Es muy importante que estos niños avancen al ritmo que les marca su propia capacidad de aprendizaje, sin dejar lagunas en conceptos básicos que son fundamentales a la hora de construir conceptos más abstractos. Para ello, el plan de estudios que propone Smartick se adapta por completo a las capacidades individuales y permite al niño avanzar según su necesidad”, concluye Javier Arroyo cofundador de Smartick y experto en educación.