TEMENOS, empresa desarrolladora de software bancario, acaba de completar un nuevo estudio acerca de los consumidores colombianos que revela cómo los comportamientos de la tercera población más grande de América Latina están cambiando para adoptar lo que se denomina “banca cotidiana”.
“La ‘banca cotidiana’ es un tipo de hábito bancario del consumidor que se enfoca en la conveniencia, el acceso instantáneo y las decisiones espontáneas. Esta investigación muestra la fuerte relación entre las finanzas de los consumidores colombianos y las redes informales conformadas por amigos y familiares”, explica Enrique Ramos O´Reilly, director para Latam y Caribe de TEMENOS. “
Para TEMENOS, uno de los roles de la “banca cotidiana” es proporcionar a la población de consumidores que ya siguen su “impulso tropical” las tecnologías que necesitan para realizar compras instantáneas después de ver algo que les llama la atención.
El “impulso tropical” es algo que comparten todas las naciones latinoamericanas y se refiere a una cultura de fluidez y pasión aplicada al bienestar financiero que aprovecha rápidamente las oportunidades a medida que se presentan en la vida diaria, y podría estar guiado por los instintos, la red informal de amigos y familiares, o una decisión espontánea de vivir en el “aquí y ahora”.
Como muestran los nuevos hallazgos, el “impulso tropical” ya es evidente en los hábitos de consumo de los colombianos: (46,1 por ciento) de los encuestados hace compras no planificadas o “impulsivas” todos los meses (41,3 por ciento) o cada semana (7,4 por ciento).
Los avances tecnológicos que permiten que florezca ese “impulso tropical” también parecen estar calando en el consumidor típico colombiano. La investigación de TEMENOS revela que el 42,9 por ciento de los encuestados ha realizado una compra impulsiva de entre 41.000 y 200.000 pesos desde su teléfono móvil, y más de las tres cuartas partes (84,8 por ciento) han realizado una compra impulsiva de hasta 500.000 pesos desde su smartphone.
“Si bien vemos mucha evidencia que sugiere que los consumidores colombianos ya están haciendo un uso rápido de la tecnología de compra móvil, más de la mitad (59,6 por ciento) de los encuestados usa efectivo para los gastos semanales y regulares, y la otra mitad acude, principalmente, a tarjetas débito (19,2 por ciento) o transferencias bancarias (12,3 por ciento)”, comenta O´Reilly.
“Los proveedores bancarios deberían pensar en cómo pueden hacer que la banca sea más simple y accesible si quieren ir más allá de las compras espontáneas. Las instituciones financieras tienen la oportunidad de ayudar realmente a los consumidores colombianos con sus gastos de compras del día a día y administrar sus gastos mensuales”, concluye el ejecutivo.