Uno de los temas más delicados en nuestro país ha sido el relacionado las alzas en los costos de las facturas de energía, lo que es evidente en el hecho de que la inflación de la electricidad se ubicó en un 15,28 por ciento en febrero. La coyuntura ha llevado a expertos a pensar en alternativas que puedan aliviar esta problemática.
Algunas de las variables que producen las alzas incluyen, en primera instancia, los costos de generación, transmisión, distribución y comercialización de la energía que deben asumir las empresas encargadas, junto con los retrasos en la implementación de proyectos energéticos que mejoren la calidad del servicio en el país.
Desde este punto de vista, una de las grandes premisas es que digitalización y electrificación sean el futuro, sumadas al paulatino reemplazo de los combustibles fósiles.
Al respecto, Schneider Electric recomienda que las compañías que entreguen servicios de suministro y los usuarios cuenten con tecnología de monitoreo de energía, incluyendo equipos con estándares de precisión del 0,1 por ciento.
“Las empresas distribuidoras, generadoras y transmisoras deben ser pioneras en la concienciación del consumo y apostar por tecnologías con mejores estándares internacionales que ayuden al control de pérdidas y costos de electricidad, una situación que influye en los costos de tarifación en diferentes regiones de Colombia”, argumenta Daniela Mora, directora de Digital Energy para el Clúster Andino en Schneider Electric.
En esta misma línea, la alta precisión de un medidor es fundamental para la contabilización, el contraste y la distribución precisa de costos de energía, tanto para empresas generadoras y distribuidoras eléctricas, como para clientes no regulados.
“Ya hemos implementado los primeros proyectos de actualización tecnológica con precisión del 0,1 por ciento en los equipos ION8650, obteniendo resultados que superaron la expectativa en el ahorro de costos de electricidad, con mejores retornos de inversión en el corto plazo para empresas eléctricas y usuarios finales de diferentes segmentos”, indica la ejecutiva.
Modernizar los medidores de las compañías locales ofrece beneficios no solo a nivel externo, sino que también mejora la productividad internamente, ya que es posible que los trabajadores puedan visualizar todas las variables eléctricas de medición desde cualquier lugar de trabajo.
A eso hay que sumar análisis y reportes de la calidad de potencia requerida por el distribuidor de red, lo que favorece económicamente a la compañía, que no tiene que contratarlos con terceros, como normalmente sucede.
Finalmente, las compañías que apuesten por proyectos de migración tecnológica le abren la posibilidad al fortalecimiento sostenible de su labor, obteniendo así diversos beneficios tributarios.