Por: Juan Camilo Motta Ospina, Consultor en gestión empresarial
En tiempos de COVID-19 uno de los temas que viene tomando gran auge es el relacionado con el riesgo psicosocial al que ahora nos exponemos por el cambio del comportamiento que ha sufrido nuestra sociedad en sus dimensiones familiares, laborales y sociales. Investigando sobre el tema, me encontré con un articulo de Harvard Business Review (HBR) publicado en noviembre de 2016 titulado “Why Some People Get Burned Out and Others Don’t”[1], que en español sería algo como “Por que unas personas sufren de Burned-Out y otras no”; el cual considero que hoy toma más relevancia que nunca para reflexionar y profundizar en las maneras que podemos promover hábitos de salud mental y evitar tener que lidiar al corto plazo con la atención de enfermedades mentales.
En este articulo las autoras hacen una breve reseña de diferentes estudios donde analizaron como los altos ejecutivos manejan el estrés para evitar padecer del síndrome de desgaste ocupacional o como lo conocemos normalmente “Burneout” (estrés y burneout no son lo mismo); utilizando como herramienta principal la Inteligencia Emocional (IE), estrategia que ayuda evitar que el estrés desencadene en este síndrome, ya considerado en el algunos sectores del mundo como una enfermedad laboral.
A través de la IE, estos altos ejecutivos logran mantener bajo control sus niveles de estrés, siendo consientes y utilizando en su día a día los componentes que conforman la IE, como ser auto-consciente de sus emociones (Emotional Self Awerness) lo que nos ayuda entender la fuente de nuestra frustración, ansiedad y mejorar nuestra habilidad para comprender por que respondemos de cierta manera a cada situación, en pocas palabras ser honestos con nosotros mismos. También la autorregulación (Self Managment) para mantenerse calmado, controlar los impulsos y actuar apropiadamente cuando se enfrenta el estrés; como una frase sabia del argot popular Colombiano “Uno es dueño de sus pensamientos y presos de sus palabra”. La habilidad para la resolución de conflictos (Conflict managment) ayuda a focalizar nuestra ansiedad y emociones hacia una mentalidad enfocada en solucionar el problema en vez de permitir que la situación nos moleste y aumente nuestro estrés. Como complemento, la empatía ayuda a combatir el estrés, ya que cuando estamos activamente tratando de entender a los demás, empezamos a preocuparnos por ellos. Y la compasión, como otras emociones positivas, ayudan a contrarrestar los efectos del estrés y nos permite ponernos en sintonía con las perspectivas, actitudes y creencias de los demás lo que contribuyen a nuestra habilidad de generar confianza e influir positivamente en otros.
Como reflexión, después de revisar la primera parte del articulo, se puede decir que ahora la IE se convierte en uno de esos “Skills” necesarios en a actualidad para sobrellevar la incertidumbre que genera la pandemia que vive el mundo y contribuir a la reinvención de nuestra sociedad.
Ahora bien, las autoras del articulo hacen las siguientes recomendaciones y acciones a seguir para manejar el estrés:
- Evitar ser uno mismo la fuente del estrés. Muchos creamos nuestro propio estrés.
- Hay que reconocer nuestras limitaciones. Estar atentos de nuestras fortalezas y debilidades.
- Respirar profundo cuando sientas que la ansiedad o la tensión están creciendo rápidamente en ti. Utilizar técnicas del Mindfulness
- Revaluar desde diferentes perspectivas las situación.
- Minimiza el conflicto al ponerse en los zapatos del otro.
Por ultimo y mi consejo personal: “No hay razón alguna para estresarte por algo que no puedes controlar o que tus acciones no puedan cambiar, por el contrario déjalas ir (lo más difícil) y surfea estas situaciones. Utiliza tu energía de manera enfocada en las cosas que efectivamente tienes control y puedes hacer y esfuérzate para que sientas que tus acciones realmente aportan al mejoramiento de tus condiciones o labores.
Lee el articulo de HBR en el siguiente Link: Artículo HBR
[1] K. Wiens & A. McKee , Why Some People Get Burned Out and Others Don’t, HBR, Nov 2016
2Photo by Tengyart on Unsplash, Zolotaya Dolina, Russia