Este 22 de abril se celebra el “Día de la Tierra”, una fecha cuyo objetivo es generar y ampliar la concienciación en torno a las acciones que se pueden concretar para mitigar los efectos del cambio climático, la deforestación y otras problemáticas medioambientales.
De acuerdo con un informe dado a conocer recientemente por el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), las iniciativas que se han puesto en marcha frente a la actual coyuntura ambiental son insuficientes para alcanzar metas de sostenibilidad que garanticen la salud del planeta en el mediano y largo plazo.
De acuerdo con la entidad, de mantenerse la actual inacción global será más difícil controlar el aumento de 1,5°C proyectado para las próximas dos décadas.
Para cumplir los objetivos necesarios y mitigar estos efectos, es crucial reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) a escala mundial en un 45 por ciento para 2030 y alcanzar una tasa cero de emisiones netas de cara a 2050.
Sin embargo, el panorama es poco alentador. De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas, estos indicadores de emisión de CO2 aumentarán un 14 por ciento durante la presente década, situación que podría desencadenar la mayor tragedia ambiental de la Historia.
Una de las industrias de la cadena de suministro que puede marcar una gran diferencia frente a este desalentador panorama es la logística, debido a que la mayoría de las flotas vehiculares que se utilizan con estos fines funcionan con combustibles fósiles.
Cifras oficiales del RUNT indican que durante enero se registraron 397 automóviles eléctricos en Colombia, una cifra muy inferior a los 17.000 vehículos que hacen uso de gasolina o diésel que comenzaron a circular durante el mismo período en el país.
Sin embargo, tampoco es factible contar con muchos más automóviles eléctricos en Colombia. De acuerdo con Andemos (Asociación Nacional de Movilidad Sostenible), a finales de 2021 se contabilizaban apenas 155 electrolineras y 238 conectores en todo el territorio nacional, cifra insuficiente para enfrentar un incremento en los requerimientos de parque vehicular eléctrico.
Además, el cambio a vehículos eléctricos no podría darse de manera inmediata, por lo que la optimización del transporte con los automóviles que actualmente circulan parece ser una alternativa viable.
Una de las compañías presente en el país que se ha dedicado a medir el uso de combustibles fósiles en la logística, es SimpliRoute. Esta startup ofrece un software que planifica, de manera eficiente, las rutas para los comercios, con la consecuente disminución de los tiempos de entrega, la cantidad de combustible necesario para operar y los kilómetros recorridos, aumentando así la satisfacción de los clientes.
“El término de logística ecológica (o verde) se define como la combinación de estrategias y procesos que tienen como fin reducir la huella de carbono, que proviene, en su mayoría, de las operaciones de distribución y entrega de productos. En logística, transportar un bien de un punto a otro ha sido una de las principales causas de contaminación ambiental. El principal reto es reducir las emisiones sin afectar de manera directa el desarrollo del negocio”, detalla Álvaro Echeverría, CEO de SimpliRoute.
En su “Informe de Sostenibilidad 2021”, dado a conocer en abril, la startup destaca que tan solo durante 2021 la implementación de su software en Colombia disminuyó en casi ocho millones los kilómetros que sus clientes recorrieron para entregas.
Lo anterior significa que, gracias a este software, se ahorró el año pasado poco más de un millón de litros de gasolina en Colombia (considerando un rendimiento de ocho litros por kilómetro recorrido). En términos de impacto ambiental, se traduce en una reducción de más de 1.500 toneladas de CO2.
“Entender cómo se comportan las ciudades permite que el software le diga a un camión cuál ruta no tomar o qué horario evitar. Para un vehículo, estar en un embotellamiento es lo más ineficiente que hay, porque se quema combustible sin avanzar”, agrega Echeverría.
Se pronostica que para 2022 el ahorro en cantidad de kilómetros recorridos por los clientes de la startup disminuya en un 31 por ciento con respecto al año pasado, pero con una mayor cantidad de entregas (mayor eficiencia). Esto evitaría que se consuman 44.246.975 litros de gasolina.