Los minoristas no son ajenos a la disrupción de las tecnologías de la información (TI), por lo que con las compras en línea se vieron obligados a innovar y ajustar sus estrategias a los nuevos hábitos de consumo. Esta tendencia está lejos de terminar pues el Internet de las cosas (IoT) crea nuevas oportunidades para que las tiendas físicas y virtuales puedan innovar creando experiencias únicas para el cliente.
Una investigación de Euromonitor International sobre la tendencia del consumidor en retail concluyó que el 58% de los consumidores está de acuerdo o muy de acuerdo en que busca experiencias digitales que sean adaptadas a sus gustos. Por su parte, el 46% de ellos manifestó que está dispuesto a gastar más dinero para ahorrar tiempo. Con esto en mente, los minoristas pueden pensar en brindar mejores experiencias que se acomoden a los gustos de cada individuo, al mismo tiempo hacen que las compras en sus canales sean más eficientes.
Para dar un paso más allá en lograr este objetivo, las compañías de retail que busquen adoptar la tecnología del Internet de las cosas requerirán de una planificación seria y una implementación meticulosa en TI. Parte de eso implicará invertir en Edge Computing, que pone el análisis y el procesamiento de los datos más cerca de las “cosas” en IoT y las personas que las usan.
Las soluciones de Edge Computing son de fácil implementación tanto en espacios grandes como en los reducidos ya que solo se requiere de una UPS, un PDU, un rack, o un microdatacenter, mientras que los beneficios que traen son innumerables, entre ellos está que se implemente una administración centralizada, la automatización y el control.
Estas soluciones también permiten una infraestructura de TI más ágil y confiable que puede ejecutar múltiples aplicaciones. Los minoristas con redes distribuidas necesitan tecnología de punta para garantizar que las tiendas puedan usar el control y la flexibilidad de los servicios basados en la nube. Para admitir estas nuevas aplicaciones, los microdatacenters de alta resistencia se han convertido en la solución preferida.
Por ejemplo, los armarios de servidores, que no ocupan espacio a nivel del piso en un almacén, albergarán la infraestructura y las aplicaciones que permiten el procesamiento en tiempo real de los sistemas de la cadena de suministro sin el retraso o el costo que podría ocurrir si los datos tuvieran que viajar constantemente de un lado a otro de la nube.
“La infraestructura en el Edge Computing integra muchos factores. Nuestra solución de Edge Computing, la cual está basada en la arquitectura de EcoStruxure para el IoT, involucra una infraestructura física y una solución de software, brindando soporte a servidores, equipos de red y toda la comunicación que tiene que existir en el ecosistema de TI”, explicó Roberto Chávez, gerente de Desarrollo de Negocios Transaccionales SAM para Secure Power.
Adicionalmente, otras ventajas que brinda la solución de microdatacenters, además de mejorar la experiencia del cliente, es el control de acceso que evita el ingreso a lugares del almacén a personas no autorizadas, la mayor eficiencia operativa al sincronizar de manera más rápida y eficiente los servicios de la tienda física o en línea, y la facilidad para administrar las tiendas al sincronizar los servicios y tenerlos siempre disponibles para saber cómo están funcionando sus procesos. Por último, el Edge Computing, al estar procesando los datos más críticos de la compañía, puede presentar un análisis de data en tiempo real que puede ser utilizado en la toma de decisiones al interior de la compañía. Ese mismo informe puede ayudar a predecir fallas y evitarlas con el reconocimiento de posibles inconvenientes desde su origen.