La creación de la facturación electrónica cambió por completo la forma de hacer negocios a nivel mundial.
Gosocket es la herramienta que entrega mayor beneficio para los negocios gracias sus procesos eficientes en generación, envío, entrega y recepción de documentos.
El mercado global evoluciona constantemente. No es casualidad que las compras en línea, en plataformas o aplicaciones sean cada vez más constantes; así mismo ha sido el desarrollo de la facturación, que día tras día se impulsa hacia las plataformas digitales.
Se estima que más de 550 mil millones de facturas impresas son entregadas cada año, un número que, aunque es elevado ha ido en constante decrecimiento con el paso del tiempo, sólo durante lo corrido de 2019 se han enviado más de 55 mil millones de facturas electrónicas.
El tamaño del mercado global de facturación electrónica durante el presente año asciende a más de 4,3 mil millones de Euros, y se espera que alcance los 18 mil millones de Euros en 2025.
En el mundo los servidores externos para facturación electrónica como Gosocket, juegan un papel principal dentro de la digitalización de este mercado. Empresas como esta no sólo se les considera como generadores de formatos digitales, también son los encargados de cumplir con las normativas de cada país, representado facilidades para el gobierno local y la industria.
El mercado asiático cuenta con países muy avanzados en facturación electrónica como Kazajstán, Singapur, Hong Kong, Taiwán y Corea del Sur. En los últimos años, la industria de la facturación electrónica se ha expandido gradualmente desde el comercio electrónico y las telecomunicaciones a seguros, comercio minorista, restauración, transporte, servicios públicos y otras industrias. Según la información pública, se emitieron 1.31 mil millones de facturas electrónicas en 2017, y se espera que el mercado alcance 54.550 millones de facturas electrónicas para el año 2022.
Europa por su parte, aunque es considerado como un mercado de amplio desarrollo y de tradición en optimizar los procesos de digitalización, se encuentra más distante a los demás mercados internacionales. Esto debido a que cuenta con más de 40 países (28 de ellos miembros de la Unión Europea). A su vez, 40 legislaciones diferentes, con más de 100 idiomas que dificultan la unidad para establecer la facturación electrónica en el comercio europeo.
Para Norteamérica la optimización de las operaciones internas, automatización de compra, pago y factura, es actualmente un objetivo principal para las empresas de EE. UU. Más de 200 operadores de redes de facturación electrónica cumplen estas funciones, debido a que EE.UU. no tiene IVA, uniendo el sistema de impuestos sobre las ventas comerciales.
En 2018 Colombia se comenzó el despliegue de mandato de facturación electrónica para empresas grandes. Durante el presente año y el 2020 comenzó el periodo de transición, en donde se deberán vincular la mayoría de empresas del país a este tipo de comercio y facturación digital.
En el mercado de Latinoamérica, Chile, Brasil y México son considerados como los primeros en adoptar el sistema de facturación electrónico, aumentado su desarrollo gradualmente. En Brasil, se estima que más de 1.6 millones de empresas emiten este tipo de comprobantes digitales, debido a que la facturación electrónica es obligatoria para todas las empresas del país.
Por su parte la autoridad fiscal de Argentina hizo obligatoria la facturación electrónica a todos los sectores de la economía en la primavera de 2019, avanzando hacia la masificación obligatoria de la facturación electrónica.
Un número cada vez mayor de tecnologías de última generación disruptivas sienta una base sólida en diversos mercados en el mundo, la facturación electrónica no sólo es un modelo de negocio en desarrollo que combatirá la evasión fiscal. Entidades como Gosocket, son agentes en la reducción de generación de papel, ayudando también al medio ambiente.
La transformación digital no es más una opción, es el imperativo para el buen desarrollo de los negocios, los países y una cultura más eficiente.