IDC, firma mundial de inteligencia de mercados en TI, prevé que la economía latinoamericana seguirá su avance a través de la digitalización de mercados, con un 40 por ciento del PIB en 2022 que provendrá de relaciones, productos y servicios mejorados digitalmente, lo que impulsará el gasto en TI hasta los 460 billones de dólares entre 2020 y 2023, proyecciones que hacen de las soluciones tecnológicas los verdaderos apalancadores de crecimiento para las empresas.
Por ello, certificaciones como ISO 20000, que enmarca altos estándares en materia de gestión tecnológica, especialmente en TI, son determinantes a la hora de evaluar y mejorar los sistemas de administración del servicio en empresas de este sector, como proveedores de servicios internos de tecnologías de la información, empresas en telecomunicaciones o proveedores externos de TI.
En el país, actualmente, son pocas las empresas de tecnología desarrolladoras de software que han sido certificadas por Bureau Veritas con ISO 20000, que como lo afirma ICONTEC, permite la gestión de servicios de TI de manera metódica mediante la implementación del PHVA (Planear – Hacer – Verificar – Actuar).
Una de esas compañías fue Digital Ware, empresa especializada en software, que recibió la certificación al acatar, sin excepción, los requerimientos aplicables a la norma internacional. Para la empresa, fue un paso indispensable en la prestación de un servicio óptimo y eficiente a sus clientes, tanto internos como externos, logrando una alineación estratégica entre objetivos y metas de la empresa y los servicios de TI que apalancan el negocio.
Carolina Segura, directora experiencia al cliente y transformación organizacional de Digital Ware, afirma: “Para nosotros, los procesos internos son un flujo en el que intervienen activamente todas las áreas de la empresa. Si bien lo más importante son nuestros clientes, hemos reconocido que cada uno de los eslabones del proceso es un cliente interno y, gracias a ello, logramos agilizar y optimizar cada área, teniendo en cuenta los requerimientos de la norma, para que en conjunto todas esas acciones desencadenen beneficios en términos de experiencia”.
Para cualquier empresa enfocada en el sector de las tecnologías, contar con una certificación ISO 20000 implica diversos beneficios, entre ellos, generar mayor satisfacción en el cliente al convertirlo en el enfoque principal de la estrategia de negocio, mejorar la imagen de la marca con el fin de conquistar nuevos mercados y ahorrar recursos para la inversión en desarrollo, entre mucho otros.