En las últimas semanas, el principal tema de conversación en varias mesas de trabajo ha sido la Inteligencia Artificial (IA) debido a que los avances de OpenAI en áreas como el aprendizaje automático profundo, el procesamiento del lenguaje natural y la robótica.
Un modelo de lenguaje como GPT-3, que incluye una API de procesamiento del lenguaje natural, les permite a los desarrolladores crear aplicaciones de IA y han puesto a pensar más de uno: ¿Qué va a pasar con la educación?
Los avances en IA permiten la creación de sistemas de aprendizaje personalizados y adaptativos que pueden adaptarse a las necesidades individuales de los estudiantes.
Un ejemplo de eso es Smartick, método de aprendizaje de matemáticas y lectura en línea para niños de entre 4 y 14 años que implementa un enfoque personalizado y adaptativo para ayudar a los menores a mejorar sus habilidades matemáticas y desarrollar su pensamiento lógico.
“Desde hace más de diez años trabajamos en la implementación de la IA en nuestro método para ayudar a que la educación se adapte al aprendizaje del niño y no al contrario, como es el modelo tradicional”, afirma Javier Arroyo, cofundador de Smartick
La personalización del aprendizaje es una de las principales ventajas de la Inteligencia Artificial en la educación. Los sistemas de IA pueden analizar los datos del rendimiento del estudiante y adaptar el contenido y la velocidad de enseñanza, lo que permite un aprendizaje más eficiente y efectivo, ya que los alumnos pueden trabajar en los temas que necesitan mejorar sin perder tiempo en aquellos en los que ya tienen un buen dominio.
La IA también puede proporcionar retroalimentación inmediata y seguimiento del progreso, algo que ayuda a estudiantes y maestros a identificar y abordar rápidamente cualquier problema para mejor atención individualizada y mayor comprensión de los diferentes estilos de aprendizaje de los estudiantes.
Además, la IA puede ayudar a los maestros a hacer un mejor seguimiento de los estudiantes y las tareas, lo que reduce el tiempo que se dedica a tareas administrativas y aumenta el encaminado al aprendizaje y la enseñanza.
Sin embargo, es importante mencionar que la IA no debe ser considerada un sustituto para los maestros, sino como una herramienta para apoyar el aprendizaje. Es importante tener en cuenta que no todas las tecnologías son adecuadas para cada estudiante y que es importante considerar sus contextos y necesidades.