El mercado inmobiliario en Colombia sigue mostrando dinamismo y oportunidades de inversión.
De acuerdo con el Banco de la República, la Inversión Extranjera Directa (IED) que llegó a Colombia en el 2023 fue de 17.446 millones de dólares, monto superior en 264 millones (1,5 por ciento) a lo registrado un año antes, siendo los servicios financieros y empresariales (18 por ciento) el segundo sector de mayor inversión.
En este contexto, Felipe Becerra,CFA. experto de Colliers Colombia, resaltó la relevancia de este sector y entregó tres razones por las cuales la finca raíz es una buena alternativa.
Activos de largo plazo
La inversión inmobiliaria genera dos tipos de ingresos: valorización del inmueble y los ingresos recurrentes derivados del arrendamiento.
Estas dos fuentes de ingresos suelen estar vinculadas al comportamiento de la inflación, por lo que la rentabilidad puede ser constante, a diferencia de otra inversión en el corto plazo la cual puede no serlo.
De igual manera, es importante tener en cuenta que este tipo de inversiones es de largo plazo y, por ende, no es líquida, por lo que la persona debe fijar, primero, sus objetivos y determinar si quiere invertir en el corto o el largo plazo.
“En la actualidad se pueden encontrar propiedades muy bien ubicadas, con condiciones óptimas y cláusulas amables en los contratos de arrendamiento”, señaló Becerra.
Rentabilidad constante y estable
Al comparar las inversiones en entidades financieras o papeles comerciales de corto plazo con el sector inmobiliario se evidenció que la finca raíz corporativa puede generar hasta un 8 por ciento de rentabilidad a más de cinco años, mientras que los costos para mantener otras inversiones crecen cada año.
“Las personas buscan estabilidad en el tiempo y el sector inmobiliario la está brindando”, explicó Becerra.
Tangible y seguro
Los activos de finca raíz corporativa ofrecen una inversión tangible y segura, ya que están respaldados por bienes raíces físicos. Esto proporciona a los inversionistas una sensación de seguridad y estabilidad, especialmente en comparación con inversiones financieras más especulativas.
Desde oficinas hasta locales comerciales e industriales, existen múltiples oportunidades de ingreso en el país. Entre las ciudades en las que se está fortaleciendo esta tendencia se destacan Bogotá, como líder en inversión inmobiliaria, Medellín, Cali y Barranquilla.
“El mercado de oficinas en Bogotá se ha intensificado en los últimos años”, indicó Felipe Becerra.
El más reciente informe de oficinas de Colliers indica que al término del último trimestre de 2023 se reportó que Bogotá registró un decrecimiento en su tasa de disponibilidad de 70 puntos básicos, consolidando un 9,5 por ciento.
Medellín, por su parte, mantuvo una tendencia estable y positiva en las oficinas de la ciudad, con una oferta que disminuye un 23 por ciento, traducido en un cierre cercano a los 60.000 metros cuadrados. En términos de tasa de disponibilidad, la ciudad se posiciona con 6,97 por ciento, siendo la segunda menor en el país.
Cali se mantiene en niveles similares a los de la capital colombiana con una tasa de disponibilidad de 10,26 por ciento, y Barranquilla registra la menor tasa de disponibilidad del país, con 4,27 por ciento.
