Por: Juan Camilo Motta Ospina, Senior Management Consultant
Como muchos medios han señalado en las ultimas semanas, una de las consecuencias más obvias de la actual pandemia de Covid-19 ha sido la migración de muchas aspectos de nuestras vidas hacia un mundo digital. En especial, se espera que la transformación digital tome aún más relevancia en las organizaciones al corto plazo para poder garantizar su coexistencia en este nuevo mundo.
Pero, contrario a lo que la mayoría de personas puede pensar, la transformación digital tiene menos que ver con la tecnología y más con las personas. Hoy en día se puede comprar prácticamente cualquier tipo de tecnología, pero la capacidad para adaptarte a ella y desarrollar ese nuevo set de habilidades para afrontar el futuro digital, es la que definirá el éxito de las organizaciones.
Si bien hoy, el futuro es más incierto que nunca, podemos suponer con gran certeza que una proporción aún mayor de trabajos, tareas, actividades y carreras encontrará formas ingeniosas y novedosas de coexistir en el mundo digital, por lo que debemos apostar en capacitarnos para estar mejor equipados para adaptarnos al cosntante cambio. Teniendo esto en cuenta, Becky Frankiewicz y Tomas Chamorro-Premuzic del Harvard Businnes Review en su más reciente articulo, ofrecen algunos insights para poder prepararnos para el nuevo normal y garantizar que el talento este a la altura de la tecnología:
- Las personas Primero: la tecnología siempre se ha tratado de hacer más con menos, pero esa combinación es efectiva solo si combinas la tecnología con las habilidades humanas correctas. Si podemos aprovechar la adaptabilidad humana para mejorar nuestra fuerza de trabajo, entonces podemos aumentar simultáneamente la productividad de los humanos y la tecnología. Es bastante simple: la innovación más brillante es irrelevante si no tenemos la habilidad suficiente para usarla, e incluso las mentes humanas más impresionantes serán menos útiles si no se alían con la tecnología. Por eso, cuando los líderes piensan en invertir en tecnología, primero deben pensar en invertir en las personas que pueden hacer que esa tecnología sea útil.
- Centrarse en las habilidades blandas: así como la transformación digital se trata más de las personas que de la tecnología, desarrollar las habilidades tecnológicas clave se trata más de las habilidades blandas que de las habilidades duras (conocimiento técnico). Claro, en el mercado laboral están de moda los analistas de ciberseguridad, ingenieros de software y analistas de de datos, pero existe una necesidad aún mayor de personas que tengan la disposición para apropiar esas nuevas habilidades de TI. La mejor forma de hacer que su organización esté más centrada en los datos digitales y la virtualización es invertir selectivamente en aquellas personas que sean más adaptables, curiosos y flexibles frente al cambio. Dado que día a día surgen nuevas tecnologías y por ende nuevos conocimientos, la mejor estrategia es apostar por las personas que tienen más probabilidades de desarrollar estas nuevas habilidades que van surgiendo. Se debe contar con personas con alta capacidad de aprendizaje (habilidades blandas), personas con una mente hambrienta y un conocimiento técnico de base, entendiendo que estos últimos pronto pueden quedar obsoletas, por lo que la clave es que su curiosidad permanece intacta. “La competencia técnica es temporal, pero la curiosidad intelectual debe ser permanente.”
- Impulse el cambio desde la gerencia: En el contexto de las transformaciones digitales, hay que tener presente que no se puede esperar grandes cambios o actualizaciones en una organización a menos que comience desarrollando a sus principales líderes en este sentido. Nunca ha sido más claro que el liderazgo, tanto bueno como malo, se replica en cascada para impactar en cada aspecto de la organización, y que hasta el 50% de la variabilidad en el desempeño del grupo o unidad es atribuible al líder individual. Es por eso que el factor más importante para determinar la efectividad de la transformación de una organización, es el liderazgo del CEO o el jefe de la empresa. Por supuesto la industria, el contexto, la cultura, las personas, el legado y la tecnología son importantes para el éxito también, pero para obtener un impacto real, se debe invertir en el mejor talento, que es donde obtendrá el mayor valor.
- Asegúrate de estar actuando sobre los datos: tener información y data robusta de las diferentes audiencias a las cuales nos dirigimos, es el diferenciador en la actualidad o sobre el cual todos pelean. Pero tener gran cantidad de información, lo cual puede ser emocionante gracias a las nuevas tecnologías de Inteligencia Artificial (IA) que recopilan todo tipo de datos, no va a ser el principal diferenciador para posicionar a su organización en el futuro. Una ventaja competitiva mucho mayor es aprovechar esos datos valiosos, tener las habilidades necesarias para traducirlos en información significativa, y sobre todo que, esta información resulte en acciones concretas que impulsen a la organización. Los datos sin análisis son triviales, pero entender los datos y no actuar sobre ellos no tienen sentido. La gran diferencia de Google, Amazon y Facebook del resto de empresas, no es la funcionalidad real de su tecnología, si no sus culturas radicales basadas en entender los datos que recopilan. Han aprovechado activos de datos sorprendentes y tienen excelentes algoritmos para interpretar (y monetizar) esos datos; pero su ventaja estratégica clave y su mayor activo es que viven, respiran y actúan de acuerdo con los datos.
Como lo hemos podido observar en los últimos meses, somos agiles como sociedad para asumir los cambios y esta agilidad ha sido liderada por personas y respaldada por la tecnología. Por ello, se hace tan necesario prepararnos para el constante cambio que será nuestras vidas de ahora en adelante, de la mano del desarrollo tecnológico, pero sin olvidar que, el éxito futuro de las organizaciones se apalancara en alimentar la curiosidad y el desarrollo de habilidades blandas del talento humano para apropiar los cambios tecnológicos para un beneficio mayor.