Minsait, compañía de Indra, consolida ante la industria su compromiso con las buenas prácticas al renovar, como ha sido habitual en los últimos años, su posición en el Nivel 3 de la certificación TMMi, el estándar internacional que mide y mejora los procesos y las actividades de prueba y calidad del software.
El modelo TMMi (Testing Maturity Model Integration) es concedido por TMMi Foundation, líder mundial para la mejora de procesos de prueba, y se erige como el estándar internacional para la medición y mejora de las operaciones y actividades para testar el software.
Las compañías que forman parte de este estándar se caracterizan por optimizar la calidad del software entregado a los clientes mediante un conjunto definido de áreas de procesos, objetivos y prácticas.
Renovar de nuevo la certificación supone pues un reconocimiento al compromiso de Minsait con la calidad y su capacidad para el desarrollo y mantenimiento de software con los modelos, metodologías, procedimientos y estándares internacionales más exigentes.
Minsait utiliza este modelo como referencia para medir la madurez de sus procesos de prueba desde 2014 y ha logrado el registro en todas sus filiales en donde ha sido evaluado, lo que representa un valor diferencial para la compañía, ya que es una de las pocas organizaciones con la implantación de este modelo en ciertos países.
En esta ocasión, el certificado se ha renovado en las filiales de España, Brasil, Colombia, Perú y Filipinas. El denominado Nivel 3, dentro de TMMi, en el que se sitúa Minsait, atañe concretamente a los servicios de la ‘Práctica tecnológica de pruebas de Indra”.
En la valoración realizada por TMMi se ha destacado la evolución de esta compañía en la implantación de todas las buenas prácticas que requiere el modelo y ha valorado, especialmente dentro de su desempeño, acciones como la política y estrategia de pruebas de software, el análisis de resultados y la toma de decisiones mediante cuadros de mando, la planificación y la ejecución de pruebas (gracias a la automatización y la integración continua), pruebas no funcionales, revisiones (pruebas estáticas) y la capacitación de los equipos de testeo (gestión del conocimiento).