Debemos desarrollar las habilidades de liderazgo desde pequeñas y fortalecer el autoestima para ser capaces de cuestionar cualquier estereotipo y confiar en sus capacidades para aprovechar las oportunidades que se presentan. Ese es el mejor consejo para las jóvenes interesadas en carreras relacionadas a ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM por sus siglas en inglés).
Tras veinte años trabajando en el sector de tecnología, estoy convencida que es necesario fomentar la educación en STEM. Ahora, más que nunca, debemos estar preparadas para enfrentar nuevos retos y oportunidades, necesitamos profesionales con capacidad de resolución de problemas, para innovar y explotar las posibilidades que ofrece este sector.
Antes de llegar a Vertiv, mis jefes directos siempre habían sido hombres, pero en el 2019 después de la restructuración de la organización tengo a una mujer como jefe. Al inicio pensé que iba a ser difícil adaptarme al liderazgo femenino, pero ha sido un gran soporte, tiene mayor empatía con las decisiones y un mejor entendimiento en situaciones emocionales.
Por ejemplo, cuando me enfermé de covid, estuvo cien por ciento pendiente de mi recuperación y me apoyó con el seguimiento de las acciones que estaba liderando durante mi ausencia.
Poco a poco, las mujeres se han abierto paso en el mundo de la ciencia, tanto en puestos de investigación como en posiciones de liderazgo e innovación.
Por ejemplo, como señala la Revista Muy Interesante, algunos de los primeros sistemas de reconocimiento de voz fueron calibrados para voces masculinas, por lo que las voces de las mujeres no eran reconocidas. Esto demuestra que las decisiones técnicas se basan en experiencias, opiniones y juicios exclusivamente de los hombres, muchas veces pasando por alto las necesidades de las mujeres.
Pero aún hay mucho camino por recorrer. Es muy importante que, desde etapas tempranas y durante todo el ciclo educativo, se muestre el mundo de posibilidades que existe en las carreras STEM, que no son únicamente para hombres, y presentar casos de éxito como el de Diana Trujillo, ingeniera aeroespacial colombiana, líder de la misión Curiosity de la NASA.
El estudio “Las mujeres en ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas en América Latina y el Caribe”, elaborado por Alessandro Bello, señala que solo un 30 por ciento de las mujeres en la región es estudiante de STEM. Para 2050, un 75 por ciento de los puestos de trabajo será en este sector y por eso es cada vez más necesario que, tanto la familia como los educadores, impulsen a los jóvenes para que se interesen en estas áreas.
María Noel Vaeza, directora regional de ONU Mujeres para las Américas y el Caribe, menciona en este estudio que las disciplinas STEM resultan claves para afrontar algunos de los principales desafíos de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible, desde la mejora de la salud, y la lucha contra el cambio climático, hasta la igualdad de género a todos los niveles.
Según las profesionales consultadas, en ocasiones las mujeres pasan muchos años preparándose en el campo científico, sobre todo en el área de Ingeniería, pero antes de alcanzar posiciones gerenciales abandonan el sector, ya que sienten que tienen menos oportunidades de desarrollo, sueldos más bajos y menos exposición en el trabajo.
Las herramientas tecnológicas han cobrado un papel importante en una normalidad distinta a la que conocíamos antes de la covid-19, la sociedad y, en especial, quienes tengan cabida en la formación de talentos, deberán insistir en la necesidad de despertar la curiosidad en los niños y jóvenes para que sigan utilizando las herramientas tecnológicas en beneficio de su desarrollo y adquieran las habilidades que exigirá el futuro.
En Vertiv estamos convencidos de que una mayor inclusión de mujeres puede ayudar a satisfacer la necesidad de profesionales calificados en este campo. Es por eso por lo que nuestro objetivo es empoderar y alentar a las estudiantes en los campos de STEM, para que sean parte de la industria de los centros de datos a través de diversas iniciativas respaldadas por mentorías y tutorías.
También organizamos la semana Mpowerment para el equipo de marketing de América del Norte, con el fin de empoderarlas y ayudarlas en su crecimiento personal y profesional, lo cual ha contribuido a crear una comunidad dentro de los miembros de la organización, compartir experiencias y mejores prácticas.
Es vital que en la industria tecnológica se creen oportunidades incluyentes e igualitarias para las mujeres. La ciencia no tiene género y es necesaria para lograr el desarrollo y bienestar de nuestra sociedad. Por eso sensibilicemos a nuestros jóvenes para que crean en sus capacidades y desarrollen al máximo su potencial.
Además, es importante seguir fortaleciendo políticas públicas de ciencia y tecnología con el fin de que tomen en cuenta el tema del género y promuevan estímulos para que las mujeres no tengan que decidir entre la maternidad y su trabajo, que se aseguren oportunidades equitativas, así como una educación integral desde la infancia.