Por: Johanna Rozo
El portal de National Geographic dio a conocer que investigadores de la Universidad de Columbia están trabajando y analizando cómo la luz ultravioleta lejana podría ayudar a disminuir los contagios al conseguir eliminar el virus en algunas superficies.
El mundo busca desesperadamente ideas que permitan obtener soluciones para frenar y combatir el COVID 19. Claramente una vacuna eficaz siempre será la primera opción. Sin embargo, este proceso tomará un poco más de tiempo. Es por esto, que científicos de todo el mundo avanzan en diferentes investigaciones que permitan darle al mundo buenas noticias.
En esta ocasión, la Universidad de Columbia sorprendió con un comunicado oficial en el cual dan a conocer que su Centro de Investigación Radiológica, ha empezado a estudiar cómo el efecto de ciertos tipos de luz con una longitud de onda determinada, muy específica y distinta a la de las típicas lámparas de ultravioleta actuales, podrían ayudar a eliminar los virus y las bacterias de ciertas superficies y, así, reducir la propagación del virus, sobre todo en lugares públicos y cerrados.
Este tipo de tecnología va a permitir que las lámparas emitan de manera continua luz ultravioleta lejana que será capaz de matar a los virus y las bacterias sin afectar la piel humana, ni los ojos u otros tejidos. De hecho, los actuales experimentos realizados por estos científicos les ha permitido evidenciar que este tipo de luz es capaz de eliminar los virus estacionales, los cuales se encuentran en el aire y generan resfriados y tos.
David Brenner investigador principal y director del centro, afirmo lo siguiente, “La luz UVC lejana se puede usar de manera segura en espacios públicos, y matar a los patógenos en el aire antes de que podamos respirarlos”. Así pues, usado en ciertos lugares públicos, esta tecnología podría limitar la propagación de los virus y así evitar futuras epidemias y pandemias. Además, aseguro que “No solo tiene el potencial de prevenir la propagación global del virus que causa COVID-19, sino también futuros virus, así como otros virus más familiares como la gripe y el sarampión”.
Está claro que este tipo de lámparas de luz ultravioleta lejana no terminarán con el coronavirus SARS CoV-2, pero sí pueden ser un aliado perfecto para evitar la propagación. Como apunta el científico “la mayoría de los enfoques se centran en combatir el virus una vez que ingresa al cuerpo. Sin embargo, este es uno de los pocos enfoques que tiene el potencial de prevenir la propagación de virus antes de que ingresen al cuerpo “.