Según un estudio global realizado por Bizagi, el 95% de las empresas colombianas ven el desafío de la transformación digital en su panorama, que de no ser implementado podría implicar fracasos comerciales para 8,5 de cada 10 consultados.
Nueve de cada diez empresas (87%) enfrentan una turbulencia severa mientras persiguen la transformación digital, según un estudio global de Bizagi, proveedor líder de software de automatización de procesos digitales. Específicamente en Colombia, esta cifra asciende sobre la media hasta el 95% de los casos.
El estudio global, que consultó más de 1.000 profesionales en TI y en experiencia del cliente, demostró que los negocios están adoptando rápidamente la transformación digital, al punto que el 73% de la muestra considera que no estar actualizado puede dar lugar a una caída comercial, dato que en Colombia también supera el promedio con el 86%. Sin embargo, la velocidad requerida para los cambios necesarios en relación con la complejidad del desafío, está generando ‘cuellos de botella’ en la mayoría de empresas que lo están haciendo.
El ritmo del cambio
Sólo una de cada tres empresas a nivel mundial (32%) afirman que actualmente tienen un alto nivel de proyectos de transformación digital en curso. Estados Unidos y Canadá lideran esta tendencia con un 52% de las empresas que ya están emprendiendo nuevos proyectos digitales. En Latinoamérica son seguidos por Brasil (39%), México con un 27%, y Colombia con un 20%.
Sin embargo, tres cuartas partes de los encuestados (75%) creen que el ritmo de cambio está aumentando debido a los negocios disruptivos que vienen desafiando su ‘status quo’, y la gran mayoría (82%) de los encuestados entendiendo que deben acelerar el ritmo de la transformación para mantenerse actualizados en su industria.
Los impulsadores de la transformación digital
Los impulsadores y riesgos asociados con la transformación son variados. Tres de cada cinco empresas (60%) especifican la necesidad de agilidad operativa como un factor clave, mientras que más de la mitad (54%) identifica la necesidad de responder a las expectativas cambiantes de los clientes.
Cuatro de cada cinco encuestados (80%) piensan que proporcionar una mejor experiencia al cliente, entender sus necesidades inmediatas y la situación individual es esencial para crear una ventaja competitiva. El cliente se vuelve aún más importante para las empresas con altos niveles de cambio digital en proceso, de los cuales 79% cita cambios en las expectativas del cliente como factor clave para el cambio.
“La expectativa de los clientes está cambiando la forma en la que los negocios piensan, impulsando la transformación digital”, comenta Juan Manuel Mogollón, Vicepresidente Ejecutivo de Bizagi para Latinoamérica. “La mayoría de las empresas están luchando para evitar los peligros que acompañan la transformación digital, y el secreto para superarlos está en comprender los factores de cambio y crear la agilidad TI para responder rápidamente”
“Las empresas pueden equilibrar las ideas, la colaboración y la tecnología para superar los obstáculos que enfrentan actualmente y crear un ejército de pioneros para ‘poder hacer’ realidad el cambio, lo que les ayudará a cosechar los frutos de la transformación digital”.
La trampa de la agilidad
Los principales obstáculos para las empresas que buscan una rápida transformación digital están relacionados con la cultura corporativa de la compañía, la complejidad organizacional y la falta de procesos que permiten a los empleados participar, colaborar e innovar. Estos desafíos son lo que Bizagi describe como “La trampa de la agilidad”, que se produce cuando la búsqueda de una rápida transformación digital está limitada por la complejidad comercial, organizacional o tecnológica.
El mayor riesgo que enfrentan las organizaciones es no estar listos para implementar proyectos de transformación digital, donde el 70% de los encuestados afirma que sus esfuerzos para transformar se ven impactados por la complejidad interna. En Colombia esta cifra se incrementa hasta en el 77% de los encuestados.
A pesar de dar prioridad a los proyectos de transformación, entre más rápido se mueven los negocios estos se ven enfrentados a mayores obstáculos que no le permite avanzar de manera rápida en la transformación. Como resultado de esto, las empresas están cayendo en las siguientes trampas:
Falta de planificación: No preestablecer la complejidad de los sistemas y procesos de negocio actuales antes de iniciar las implementaciones. Casi dos tercios de los encuestados (63%) sienten que ellos descuidan las implicaciones y la profundidad de los sistemas de cambiar en sus negocios cuando se trata de crear experiencias de usuario y servicios cautivadores.
Resistencia al cambio: La falta de voluntad de aceptar el cambio está mostrando que más del 51% de los negocios del Estado son o bien resistentes o han mezclado perspectivas en torno al cambio transformacional.
Sistemas que descuidan la agilidad: Sólo el 28% de los encuestados creen que sus sistemas para clientes existentes son muy ágiles, mientras que el 26% reporta sistemas de gran agilidad y sólo el 21% describe sus sistemas operacionales de la misma manera.
Mogollón añadió: “Está claro que muchas empresas se ven restringidas por graves problemas cuando llegan a la transformación digital. Esto sólo puede ser superado a través de tecnología que ayuda a evitar la complejidad del sistema, cultiva una cultura de la experimentación rápida y habilita la agilidad operativa. Sólo entonces se puede evitar que las empresas puedan escapar de la trampa de la agilidad y que puedan cumplir con sus objetivos de transformación digital”.